Tras haber jugado El Invernadero en Madrid, nos tocaba acudir a una fiesta especial en este capítulo 2: Randall's Party.
Así que tras recorrer 600 km, fuimos a por un regalo (no es de buena educación ir a una fiesta de cumple con las manos vacías), nos pusimos los gorritos y los matasuegras y picamos al timbre.
Dramático giro de los acontecimientos, Randall no estaba en casa 😭
Así que por causas ajenas al equipo, no pudimos ver a Randall y nos quedamos con ganas de fiesta. Pusimos rumbo a la siguiente misión sin demora.
Solo esperábamos que al día siguiente Madre sí que tuviera preparado el estofado... Aceptamos las disculpas, y ya visitaremos a Randall en su próximo cumpleaños. 🎉
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